domingo, noviembre 10, 2024
--EL CINE ACTUAL--
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EL CINE ACTUAL
De jovencito, allá por los 60 y 70, recuerdo que cuando veía pelis de cine club, de arte y ensayo o de los grandes directores, me esforzaba mucho en entenderlas para ver qué mensajes existenciales, filosóficos o propuestas experimentales contenían. Me metía de lleno en Muerte en Venecia, Amarcord, Viridiana, El Séptimo Sello, La Naranja Mecánica, etc. para aprender, ampliar mi conocimiento y enriquecerme culturalmente.
Un par de décadas después, el cine se volvió de espaldas al mensaje y llegó la hora del espectáculo: efectos increíbles, explosiones, realismo sangriento, vértigo, velocidad, batallas épicas, naves espaciales, súper héroes, etc., pasando al entretenimiento puro y la evasión, a que el espectador se dejase llevar por la magia y el asombro y despejase su cabeza de cualquier pensamiento.
Pero por suerte en este nuevo siglo las películas han vuelto a hacer que uno se involucre y participe. Es maravilloso, se ha conseguido que estés viendo una peli cualquiera y la propia peli te obligue a sumergirte en ella con todos los sentidos alerta para intentar descifrar la trama, para tratar de encontrar el argumento. Ahora el cine te vuelve a atrapar, te obliga a pensar, te mantiene absolutamente atento a todas las escenas para buscarles el sentido y la relación de unas secuencias con otras. Hoy en día encontrar el propósito de una peli es un reto para la mente, y eso me parece maravilloso, ya digo. Estoy muy contento porque el cine otra vez es arte. Baste decir que de las últimas catorce películas que he visto, he estado a punto de entender una.
HOSPITAL CENTRAL
Se abre la puerta de Urgencias y entra el ambulanciero a toda hostia llevando en la camilla a un tipo chorreando sangre por todos lados:
-¡¡¡Emergencia!!! ¡¡¡Rápido, un médico!!! ¡¡¡Varón de cuarenta años, con múltiples heridas de pala!!!
-Querrás decir de bala.
-¡¡¡No!!! ¡¡¡Ha sido agredido por un jardinero!!!
-Ah, jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja. Pues aún menos mal que no le ha metido un pico.
-Joder, pues la verdad es que tenía pinta de yonqui el cabrón, jajajajajajajajajaja. Pero corre, que lo perdemos, jajajajajajajajaja.
FIN