miércoles, abril 13, 2022
--Y CUATRO MÁS, OIGA--
jueves, abril 07, 2022
--LAS COSAS 8--
A veces está uno solo. Eso no es noticia.
Y algunas veces estando solo, se está la mar de bien. Pero también ocurre que hay otras veces en que no sólo está uno solo, sino que además se siente solo.
Y eso iba pensando mientras paseaba por el campo, cuando he levantado la vista y me ha llamado la atención una estructura metálica que se alzaba majestuosa en el camino.
Al llegar a su altura, la he mirado y me he dicho: "Oye, pues no será la torreifiel, pero tiene chispa."
Y esa gilipollez me ha conducido a una reflexión bastante más seria. Y es que cuando se siente uno solo, tener imaginación hace mucha compañía.
miércoles, abril 06, 2022
--CUATRO SHORRADA--
lunes, abril 04, 2022
--EL GENIO DE LA LÁMPARA Y EL DESEO--
Érase una vez un señor muy viejo, muy viejo, muy viejo, que estaba hurgando en el desván de la casa del pueblo para ver qué cachivaches había allí bajo el polvo, cuando se encontró con una lámpara que no recordaba haber visto antes. Parecía muy antigua y exótica. Y sucedió que al pasarle un trapo para quitarle la mugre, empezó a salir de su interior una especie de niebla azulada de la que surgió un genio.
El genio le agradeció que lo hubiera liberado de su largo y aburrido cautiverio y le dijo que como premio le pidiese lo que quisiera y él se lo concedería.
El viejo, consciente de que le quedaban cuatro días en el mundo, le dijo que si pudiera ser, no querría morirse. El genio le pidió que concretase un poco, que si no quería morirse ahora, o en unos meses, o en años, o cuándo. Y el anciano le dijo que lo bueno sería no morirse, así en general, o sea nunca. Entonces el genio aclaró que eso era ser inmortal. Y el viejo confirmó que sí, que justamente. El genio se lo concedió y desapareció.
El deseo se vio cumplido y el viejo no se murió nunca. Pero como tenía más de noventa años y estaba hecho una mierda, no salía de médicos. Cuando no estaba jodido de los meniscos, le dolía la espalda, o tenía la tensión por las nubes, o lo habían de operar de lo que fuera, de cataratas, de próstata, de alguna fractura... Y si no le daban tembleques y fiebres, se le formaban piedras en el riñón, o le cogían diarreas, o se le disparaba el azúcar, se le subía el colesterol, pillaba anemia, se quedaba medio sordo, lo torturaban las almorranas, tosía sin parar, se ahogaba, tenía trastornos del sueño, gastritis, neumonía, artrosis, hongos... en fin, que se pasaba todo el santo día inflándose de medicamentos y haciéndose analíticas de todo tipo, electros, radiografías, colonoscopias, resonancias, etc. yendo sin parar de un centro de salud a otro.
Pero estaba vivo, que es lo que cuenta.
