martes, octubre 24, 2023

 

--LA GENÉTICA NO SIRVE PARA NADA--

 

Supongo que a estas alturas de mi vida me habré tragado unos 400.000 documentales de fauna por lo menos. Y ya desde niño veía cómo los ciervos luchaban entre sí para que en época de apareamiento los genes del más fuerte fuesen los que se impusieran. Y al igual que los herbívoros, la misma táctica empleaban prácticamente el resto de especies. O sea que los antílopes, los búfalos, las cebras, las jirafas, o los monos, han ido heredando camada tras camada los mejores genes de sus familias para ser cada vez más fuertes y robustos mientras los leones, tigres ,leopardos, hienas, cocodrilos, etc. hacían exactamente lo mismo, con lo cual la pregunta que me formulo es: ¿Qué han ganado? Y la respuesta es: Nada.

Porque yo de niño en las series de Rodríguez de la Fuente ya veía que los cocodrilos se comían a los ñus y los leopardos a las gacelas como ahora, y que las hienas y los leones andaban a degüello igual que hoy en día. ¿Qué mierda es eso de que los machos alfa son la hostia y trasmiten unos genes que te cagas? Si fuera así, después de siglos y siglos de constante mejora, ¿deberíamos suponer que en la época de los romanos los lobos pesaban tres kilos o los guepardos corrían a veinte kilómetros por hora?

Algo no cuadra. Y mi deducción es la siguiente: los "espaldas plateadas" de cualquier especie no contribuyen a mejorarla sino a que no se estropee más. Es decir, que la tendencia natural de la genética es irse a la mierda y que los más fuertes de cada manada o rebaño sean los que más propagan sus genes lo único que consigue es ralentizar esa degradación. Con lo cual, me remito al título de este interesantísimo artículo: La genética no sirve para nada.





Comments: Publicar un comentario



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?