martes, diciembre 21, 2021
--LA GRAN CANCIÓN DEL SIGLO XXI--
I
No le perdono a este siglo
haberme hecho reaccionario
pero lo ha conseguido.
Un mal de ojo, un mal fario,
una tortura de chinos,
un calvario, tan así,
que cuando trae novedades
no puedo sino decir
que ¡UNA MIERDA PARA TI
Y OTRA PARA TU PADRE!
II
Admitamos como extraño
que los críos del milenio
nacidos en cama blanda,
vayan tanto a los siquiatras
y demás gentes del gremio,
si comparado con antes
a éstos no les pasa nada
ni grave ni medio grave,
lo cual me obliga a decir
que ¡UNA MIERDA PARA TI
Y OTRA PARA TU PADRE!
III
La música, el teatro, el cine,
en seguida se resumen:
musicales infantiles
que vendan muchas entradas;
muñecos cachas en mallas,
con carnet para volar,
marvel, disney y autotune,
productos de preescolar
para la gran muchedumbre,
que ahora el público infantil
ya es de todas las edades.
Y ante ésto ¿qué decir?
que ¡UNA MIERDA PARA TI
Y OTRA PARA TU PADRE!
IV
También deporte le llaman
a que dos degenerados
se metan en una jaula
y se revienten la cara
a codazos, puñetazos,
rodillazos y patadas,
abrazados como sierpes
intentando estrangularse
sobre una lona empapada
de sangre por todas partes,
y que sólo se detienen
si creen que van a morir.
Luego quizás los nenes,
imiten luchar así
a la salida de clase.
Por eso vuelvo a decir
que ¡UNA MIERDA PARA TI
Y OTRA PARA TU PADRE!
V
¿Qué puedo esperar de un tiempo
en que si me río ofendo
porque persigue el humor?
O acojonamiento o tedio,
enseguida lo contesto.
Mas ¿cómo no reírse viendo
a quienes causan furor
en la cima de los medios?
Y a partir de eso yo pienso:
que si el comandante es burro
no va a ser mejor la tropa...
Influidores garrulos
e influidos sin neuronas:
ésa es la clave del triunfo
y ése es el triste perfil.
Tonto pero a la moda,
descerebrado feliz
que jalea con orgullo,
su cociente de mandril
e ignora todo del mundo
sin salirse del carril.
Mas como veo difícil
el tema del no reír
y estoy presto a terminar
te confesaré una cosa,
y es que yo ya nunca digo
“amigo, voy a cagar”,
sino “a crear contenido.”
Lamento si te ofendí
siendo tan desagradable,
pero ¡UNA MIERDA PARA TI
Y OTRA PARA TU PADRE!