miércoles, diciembre 23, 2020
--NUEVA IDENTIDAD SEXUAL--
-Hola, doctor sicólogo.
-Hola, señor paciente.
-Tengo un problema mental y emocional que me conturba.
-Bueno, para eso aprobé la carrera con ocho cincos y un notable en gimnasia, para resolver estas cosas. Túmbese ahí en ese diván tan chulo y póngase cómodo.
-¿Ahí? Si son dos palés.
-Sí. Lo he hecho yo mismo. Queda muy desenfadado y muy chill out.
-Todo lo chill out que usted quiera, pero le podría poner una colchoneta o algo, porque está muy duro y tiene astillas.
-Lo tendré en cuenta. Pero ahora explíqueme qué le pasa.
-Pues que he estado mirando por internet todas las identidades sexuales que hay y no veo ninguna que cuadre con lo mío. Heterosexuales, homosexuales, transexuales, asexuales, pansexuales, antrosexuales, demisexuales, sapiosexuales, graysexuales... Hay cientos de tendencias surgiendo cada día, y en ninguna encaja mi perfil.
-Vale, pues empecemos por el principio. ¿Usted cómo se definiría?
-No sé, le he estado dando muchas vueltas y quizás podríamos decir coprosexual.
-¡No me joda! ¡¿Se pone cachondo con cagarros?!
-No, hombre, no. Eso sería coprófilo. A mí las deposiciones no me ponen. Yo es que no sé como explicarlo. A lo mejor se entendería más si en vez de coprosexual, dijéramos llanamente mierdosexual, o cagaosexual, o sea sexualmente un mierda, un desgraciado top, un puto fracaso, el tío más triste y desolado sexualmente del universo.
-Bueno, está bien, tranquilo. Necesito que vayamos al centro de la cuestión. ¿Dígame cuáles son concretamente sus prácticas sexuales?
-Pues nada, que me lo monto solo. Siempre solo.
-Caramba, por un momento me había preocupado, pero eso suyo no tiene nada de extraordinario. Miles de hombres no tienen relaciones con pareja, ni gratuita ni de pago, y se la cascan. Es absolutamente normal.
-Ya, ya entiendo lo que dice, pero yo estoy hablando de tendencias sexuales. Y en todas las que le he nombrado antes, la idea es que les erotiza una cosa u otra, que se lo hacen con quien les atrae y les excita sexualmente.
-¿Y?
-Pues que yo me lo monto conmigo mismo y me la zurro pero sin sentir ninguna atracción ni por mi mano ni por el resto de mi anatomía. Nivel de afectividad cero. Me miro al espejo en pelotas y no experimento ningún estímulo erótico ni ningún tipo de excitación. No me atraigo nada. O sea que me auto relaciono pero ni siquiera me gusto. Por eso soy un mierdosexual, doctor. Y no puede ser más deprimente.
-¿Ha probado maquillarse un poco?
-Nada, ni disfrazado.
